Desde que llegaron a la tierra donde Ñuflo de Chavez “plantó el signo de la redención” hace 453 años, las aspirantes a la corona empezaron a probar las mieles de ser tratadas como verdaderas reinas .
Ayer, a las 3:00 de la madrugada, el bus que trasladó a la comitiva del concurso y a los medios de prensa, llegó al hotel La Quinta donde se alojaron las beldades cruceñas. Apenas entraron, una de ellas, la roborense Giselle Justiniano, empezó a preocuparse, al borde del llanto, por su celular perdido, el que encontró horas más tarde dentro del bus.
Pasado ese imprevisto, y luego de un breve descanso, las chicas, bajo la batuta de Gloria de Limpias, comenzaron a alistarse para la visita al alcalde de San José, Germaín Caballero, que las recibió en el salón del Gobierno Municipal para nombrarlas huéspedes y amigas ilustres y distinguidas del pueblo. Luego comenzaron su recorrido por la iglesia jesuítica y el museo que forma parte del conjunto misional, el único construido de piedra, ladrillo y cal, y que es Patrimonio Cultural de la Humanidad. Por la tarde, de vuelta al hotel, filmaron en traje de baño.
Para hoy la agenda contempla una visita al Mirador y a Santa Cruz la antigua, mientras que el retorno a la ciudad será en la noche. Sin embargo, las candidatas volverán a San José en los primeros días de mayo, hasta el 17 de mayo para la final'
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