Sus amigos y quienes la conocen bien aseguran que la ternura al hablar de Olivia Pinheiro no es fingida. De hecho, su particular forma de ser hizo que Promociones Gloria la viera como una reina de belleza en potencia, desde que era una adolescente. La nueva Miss Universo Bolivia ya lleva tiempo preparándose para este rol y fueron sus estudios universitarios los que la hicieron rechazar en varias ocasiones la invitación de Gloria de Limpias para participar en el concurso departamental. “No estaba lista para hacerlo. Este año me animé a presentarme y aquí estoy”, dijo la flamante soberana, aún eufórica por su triunfo.
- Tuviste trabas en el camino a la corona nacional. Primero el asunto de tu edad, que decían que tenías más de 24 años. Después, el tema de que eras fingida, antinatural y hasta aniñada. ¿Qué te animó a seguir adelante?
- Mi verdad, la verdad. Tengo 24 años; el 29 de octubre cumpliré 25. Respecto a mi forma de ser, soy así, no finjo. ¿Qué puedo hacer? ¿Cambiar para gustarle a todo el mundo? No. Así me tienen que querer, como lo hacen mis padres y mis amigos. Pero te cuento que en el desarrollo del concurso he sentido que mucha gente me apreciaba y eso significa que no le caigo mal en general (risas).
- ¿Qué sentiste cuando te abucheaba la barra de la Miss Beni y después, cuando gritaron ‘fraude’ por tu triunfo?
- Los abucheos me fortalecieron, me hicieron sentir más grande y por eso elevé la voz para que la gente me pudiera escuchar más que a ellos. Estaba preparada para algo así.
- Pero, ¿te sentiste mal en algún momento?
- Es inevitable sentirse incómoda ante una situación como ésa, pero pienso que todo el mundo tiene el derecho de apoyar a quien desee. Sin embargo, no es la forma correcta; hay que respetar a la gente.
- ¿Creés que eras la candidata más idónea para ganar la corona?
- Me preparé para hacerlo. Si no estuviera convencida, no hubiera dejado mi trabajo a principios de año para inscribirme en el Miss Santa Cruz.
- Hay gente que dice que no sos una mujer bella, ¿vos qué decís de eso?
- La belleza está en el alma de los seres humanos, en su interior y se refleja con sus acciones. No me considero una mala persona y cuando me miro en el espejo veo a una mujer atractiva. Además, seguro que también escuchaste a personas considerando lo contrario (risas).
- Si pudieses cambiar algo en tu vida, ¿qué sería?
- En mi vida, creo que nada, en absoluto. Dios es quien rige nuestro destino y con sus designios no me meto. De repente lo que me gustaría hacer es modificar acciones que tomé en el pasado y que, de pronto, no fueron las mejores. Sin embargo, de todas aprendí muchísimo, y ya lo dice el dicho: llevando se aprende, ¿o no?
- ¿Y qué cambiarías en los bolivianos?
- Como cualquier persona en otras partes del mundo, tenemos defectos y virtudes. Todos sabemos que los bolivianos somos distintos, unos de otros y no por regiones. Sin embargo, creo que lo que tenemos que reforzar todos es nuestro amor por la naturaleza, por el cuidado del medio ambiente y de nuestras propias zonas urbanas. Me gustaría que la gente tome conciencia de que hay que dejar la ‘casa’ limpia, el planeta sano, a las futuras generaciones, entre las que pueden estar nuestros hijos y nietos.
- Igual que para el Miss Santa Cruz y para el Miss Bolivia. Mirá, yo soy muy metódica en ese tema y estoy acostumbrada a rutinas de ejercicios, alimentación sana y también a capacitarme intelectualmente. Felizmente me gusta leer, así que creo que no tendré problemas.
- ¿Alguna cirugía estética?
- ¿La necesito? (risas). Creo que no.
- ¿De qué te servirá el título de Miss Universo Bolivia?
- Siempre estuve ligada al trabajo social, sobre todo con los niños de escasos recursos, así que pienso brindarme a toda causa que busque fondos para ayudarlos a tener una vida más digna.
- ¿Y cómo anda tu corazoncito?
- (Risas) Enamorado y agradecido. Mi cortejo (el tenista Alberto Sottocorno) me ha apoyado desde el inicio del concurso, al igual que mi familia. Estoy inmensamente agradecida con ellos, con la prensa y con Dios.
Más de ella
✦ María Olivia es hija del veterinario brasileño José Carlos Pinheiro y de la decoradora de interiores boliviana ‘Cotty’ Menacho. Tiene un hermano, José Carlos, de 22 años.
✦ Salió bachiller del colegio Santo Tomás de Aquino y por intercambio también se graduó en un centro educativo en Cambridge (Inglaterra), donde perfeccionó el inglés.
✦ Estando en Europa, aprovechó para visitar a sus parientes paternos en Italia (su abuela es italiana). Allá aprendió el idioma, que luego mejoró en un curso en la UPSA.
✦ El portugués es su segunda lengua, porque en su casa su padre lo habló siempre con su familia. Además, lo practicaba en sus vacaciones en Brasil.
✦ Hasta principios de este años, Olivia trabajó en una repartición de la Gobernación, donde como psicóloga ayudaba a los niños que habían sufrido por los desastres naturales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario